10 ventajas de contar con un asesor de empresa familiar en los procesos de sucesión.
Sin duda alguna, la sucesión en las empresas es un proceso de enorme complejidad, el cual debe realizarse con la ayuda de auténticos expertos en la temática. Y es que según indican algunos estudios oficiales, el 70% de los negocios familiares no son capaces de sobrevivir al retiro de su fundador, debido en gran parte, a que no saben cómo afrontar el proceso de sucesión.
El reto de sucesión consiste en llegar a acuerdos sobre quiénes son los más indicados para liderar la construcción del legado común y qué procedimiento utilizará la familia para elegirlos. Dicho proceso no suele ser sencillo, por lo que contar con un consultor externo que te ayude a llevar a cabo el proceso, puede tener varias ventajas que te contamos a continuación:
- El tema se pone sobre la mesa. El mero hecho de contratar a alguien externo hace que el tema se trate, incluso para quien se plantea la sucesión y no sabe cómo hacerlo o cuál debe ser el primer paso.
- Se establece una hoja de ruta clara para llevar a cabo el proceso, con fases y tiempos.
- Sabe si hay talento familiar dispuesto o no a asumir la responsabilidad. Hay dos situaciones extremas: a) No hay talento dispuesto a asumir o b) Hay varios talentos y se hace complicado elegir a uno sin que los demás se sientan desmotivados.
- Se legitima el proceso de sucesión porque el consultor garantiza su transparencia. El consultor se convierte en un externo que legitima el proceso. No solo lo diseña, sino que garantiza que sea transparente.
- Ayuda a definir profesionalmente un perfil sin sesgos. Un consultor externo, puede hacer una buena definición del perfil en función, del momento familiar, retos futuros y cultura de la organización. Y lo mejor es que lo hace sin sesgos de ningún tipo.
- Todos los stakeholders pueden opinar libremente a través del asesor. Muchas conversaciones difíciles su vuelven más fáciles al ser el asesor el que las tiene.
- Se prepara mejor la transición entre el líder que deja el puesto y el nuevo. Ayuda a comprender que el proceso no termina con el nombramiento. Hay que acompañar al sucesor, para acelerar su proceso de comprensión del sistema de negocio y así incrementar las posibilidades de éxito.
- Ayuda a los órganos o equipos a trabajar con el nuevo líder. Comprender qué cambios tiene que haber en otros participantes. Cuando alguien nuevo entra, todo el equipo se debe reacomodar al igual que la junta directiva. Con cada CEO es diferente. El actuar de las juntas es distinto por la confianza y la experiencia entre otros factores.
- Ayuda a detectar otras necesidades de sucesión. Un externo comprende que las sucesiones no son de una persona, sino de generaciones, y ayuda a que todas las partes también puedan verlo así.
- Permite quitar obstáculos en los primeros meses de gestión del nuevo líder. Los grandes cambios en las familias empresarias se hacen a través de un equipo de familiares o de una familia que se tiene que comportar como un equipo. Necesitan no solo un asesor, sino alguien que haga el papel de coach, que ayude a que ellos se comporten como un equipo y el equipo avance.
La figura de un consultor externo es clave a la hora de definir un proceso de sucesión, ya que gracias a la ayuda de estos especialistas, los líderes de las empresas saben cómo hacer frente al relevo generacional en las áreas más importantes del negocio. Por ello, las organizaciones deben colaborar con un consultor externo para realizar estos cambios tan trascendentales.